(Juicio Universal de San Marcos. Florencia)
¿Quién habla este lenguaje?
¿Quién ha sido el que .tuvo
estas palabras
por herencia?
La luz se ha parcelado en aljimeces,
retazos sucesivos
de amaranto
para enmarcar los rostros
de una música.
Cogidos de la mano
van los días
como listados surcos
de piel móvil.
Queremos un idioma
que nos sirva
para escalar la nieve
interrogante.
Queremos un voz de huerto
en sombra,
de círculo motriz
o de almadraba
que nos sujete el flujo
de las horas.
Sabemos que lo estático
no vive,
y el gozo es una danza
incontenida
donde podemos ser
sin otros lances
que los acantos líquidos
del ritmo.
El prado de los cielos
se refleja
en alas de metal,
en pies de azúcar.
La herida de los ojos
es un lago
de sangre verdiazul
en remolino.
Navegarán las manos
otros vientos
vecinos de las lenguas
de los árboles.
Hay flores enterradas
y un arroyo
de flautas de marfil
recién talladas.
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